Por Pamela Fink
Habemos gente en San Miguel y el mundo que no caemos ante los encantos de Cupido y su flecha envenenada que parece querer incitarnos al consumismo de cosas que nuestra pareja absolutamente no necesita: Chocolates derretidos, vinos dulzones, cenas sobrevaloradas y experiencias románticas que más bien resultan ridículas.
Para aquellos Grinch del amor, tenemos varias alternativas divertidas que pondrán freno al desbocado día de los enamorados y que harán que probablemente la pasemos mucho mejor.
Sammy Social Room que se autpromocionan como los dealers de los good times, proclaman que oficialmente Cupid Is Cancelled por sus polémicos matches por lo que se celebrará su happening de cancelación este sábado a las 10 pm en colaboración con La Playita Beach Club y la experiencia gastronómica de Fuego & Agua.
Ahora bien para todos los solteros de San Miguel, es simplemente imperdible la Single Party que será organizada el 15 de febrero con un Dress Code estrictamente en blanco contrastando la cursilería del rojo o el rosa en donde muchas personas solas se darán cita para disfrutar de este evento de buen gusto en uno de los sitios más exclusivos de la ciudad.
La experiencia incluye un cóctel de bienvenida además de 5 cócteles de autor así como un maridaje con una selección de exquisitos canapés amenizado todo por un DJ en los controles.
Otro evento que vale la pena mencionar en retrospectiva fue el Rebeldes de Cupido que sucedió hace unas horas en donde aquellos que se rehúsan a seguir la norma romántica tuvieron cita en el restaurante Spice Market del Hotel Live Aqua cuya comida se especializa en una fusión entre los ingredientes locales de nuestra región con la gastronomía del Sudeste de Asia.
Algo que de igual manera llamó nuestra atención fue la atrevida apuesta de la Cena Erótica de Hotel Matilda que jamás deja de sorprendernos. En esta ocasión con alimentos afrodisiacos como ostiones por parte de la Chef Enid Vélez y el performance en el cuarto oscuro curada por Oscar Manuel García Román pusieron el tono juguetón para que tuviera pie una noche que se sale fuera de lo convencional esperado del 14 de febrero.
